Espolio

Hay un hueco en la pared. La música se quedó en silencio. Hay libros en solitario, una tabla de planchar sin plancha. Tomaré yogurt para desayunar en vez de café, cerveza en altas jarras robadas para sustituir al vino (ajeno) en finas copas de cristal. Tiraré las dos bolsas de basura de lo declarado inservible (corbatas amarillas, camisas de cuello gastado, diferencias en el camino) y aún quedará lixo por despachar. Proceso de depuración. De limpieza. Volver a empezar.
Pero las referencias no dejarán de existir sólo por que hayan desaparecido los objetos. La bandera republicana seguirá simbolizando un vicio compartido y la lucha entre el miedo y el arrojo. La fina línea del que siempre tiró más fuerte. Lagartija Nick será un aprendizaje pero también el aire nocturno de unos patines. Algunos autores, un descubrimiento. Aquellos zapatos son un viaje a París y su contradicción. Tierra y libertad, las lágrimas que nunca derramarás, aunque lo deseases. Si Evoramonte se borrase así del mapa.....
Ya lo tomé prestado hace poco y lo repito por que no encuentro mejor manera de definir la ausencia: “Durarán más allá de nuestro olvido, no sabrán nunca que nos hemos ido”.